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Malos augurios para la sostenibilidad financiera sanitaria. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde) ha lanzado una alerta sobre esta tendencia y según el organismo económico, 2060 será el primer ejercicio en que los gobiernos no podrán contener el gasto en salud.

De acuerdo con el informe de la Ocde, el gasto en sanidad y servicios sociales supondrá de media el 9% del Producto Interior Bruto (PIB) en el ejercicio 2030, y el 14% en 2060.

“El aumento del gasto sanitario ha supuesto mejoras en los sistemas de salud, siendo una importante fuente de crecimiento laboral. Sin embargo, los sistemas sanitarios que conocemos en la actualidad, en el futuro serán muy difícil financiarse desde la administración pública sin no se realizan reformas”, señala el estudio.

Esta insostenibilidad estará provocada, según la Ocde, por distintas causas, tales como los demográficos, el aumento del gasto, la revolución tecnológica y las políticas sanitarias asociadas a los servicios sociales, entre otras.

En 2015, el Gobierno de España gastó un 14,9% en sanidad. Este dato coloca al país del sur de Europa por debajo de la media de la Ocde, que se sitúa en un gasto del 15,3%.