Los resultados financieros de Lilly en el primer trimestre del año han mostrado un sólido crecimiento del 45% en los ingresos interanuales, alcanzando los 12.728 millones de dólares. Este impulso se debe principalmente a las fuertes ventas de la tirzepatida, comercializada bajo las marcas Mounjaro (para diabetes y obesidad en España) y Zepbound (para obesidad en Estados Unidos). La tirzepatida generó un total de 6.152 millones de dólares en ingresos en el trimestre, lo que representa casi la mitad de la facturación total de Lilly. Mounjaro registró ventas globales de 3.841 millones (+113%), mientras que Zepbound, solo en EE.UU., aportó 2.311 millones (+346%).

Detrás de la tirzepatida, el siguiente medicamento con mayores ventas fue el oncológico para mama abemaciclib (Verzenio/Verzenios), con 1.158 millones de dólares. Ante la alta demanda, Lilly ha invertido 5.300 millones de dólares para incrementar su producción de tirzepatida. El beneficio neto de la compañía en el trimestre se situó en 2.759 millones, un 23% más. Lilly espera que sus ingresos anuales alcancen los 61.000 millones de dólares este año, basando esta previsión en el entorno comercial vigente a principios de mayo y expresando prudencia ante posibles cambios políticos, incluidos aranceles al sector farmacéutico como ha amenazado Donald Trump.