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07/05/2018 12:01:46
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Fortalezas de la nueva ley de contratación del sector público

  • La nueva Ley de Contratos del Sector Público supone un paso del proveedor clásico al proveedor estratégico. Expertos en gestión sanitaria valoran el alcance de la reforma por su impulso a las pymes, el desarrollo de compra innovadora y el fomento de la competitividad

Superado el tiempo de incertidumbre que toda reforma jurídica supone, la administración sanitaria ve con muy buenos ojos las fortalezas y oportunidades que la nueva Ley de Contratos del Sector Público implica. Con ánimo de ahondar en la perspectiva de su impacto en el sector, Grupo Joly celebró la semana pasada un desayuno coloquio en el que se reflejaron varias virtudes del nuevo marco regulador y los escenarios que la norma propicia.

Horacio Pijuán González, director General de Gestión Económica y Servicios del Servicio Andaluz de Salud, subrayó que esta ley es fruto de un proceso largo de modernización de la contratación pública que se inició con directivas del año 2004. "La ley lo que hace es potenciar determinados aspectos ya planteados, especialmente en el impulso de la eficiencia en el gasto público. La necesidad de blindar la eficiencia y conseguir la mejor relación calidad precio aparece de una manera clara desde el mismo preámbulo de la ley e impulsa aspectos como la agregación de compras, las centrales o la compra innovadora y de procesos". Desde su punto de vista, otro tema nuclear es el desarrollo de la competitividad ya que impulsa la competencia y propicia la participación de pymes, facilitando y agilizando procedimientos. Asimismo, "impulsa una serie de valores comunes, amparados en la sostenibilidad medioambiental, laboral o social". Por último es clave el apoyo a la innovación. "No son conceptos nuevos pero la ley los impulsa de una manera determinante. Transparencia y seguridad jurídica son conceptos reforzados", expus

De este modo, la ley aspira a convertirse en un elemento estratégico, en una herramienta de los poderes públicos para impulsar la eficiencia y la competitividad e introducir la innovación. Aunque afecta a todos los sectores, Pijuán destacó que la sanidad representa "un porcentaje muy elevado del gasto público y abarcamos cualquier tipo de relación mercantil comercial que pueda existir ahora mismo en la sociedad: arrendamientos, suministros, conciertos, fungibles, inversión o equipamiento".

El SAS tiene más de 161.000 códigos de compras, de los que cuelgan más de 700.000 referencias comerciales y establece relación con más de 17.000 proveedores con un número de facturas anuales supera el millón. En definitiva, "supone una oportunidad para seguir evolucionando en el enfoque de la contratación; de un enfoque de aprovisionamiento, que era el habitual, a uno de dotación estratégica". "El objetivo es que la contratación esté ligada a nuestros proyectos estratégicos y sean un soporte adecuado para la realización de los mismos" afirmó Pijuán. Para Nieves Romero, directora gerente del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, el alcance de la reforma traerá también beneficios a la ciudadanía, que podrá percibir ese impulso a la eficiencia. "La primera vez que supimos de la ley nos generó incertidumbres, ya que todos los cambios normativos son importantes para un hospital que atiende 300.000 urgencias al año y más de 5.000 intervenciones quirúrgicas. Pero una vez que hemos conocido el alcance de la ley y cómo la vamos a desarrollar estamos seguros de que es algo que nos va a fortalecer", explicó. Asimismo, Nieves Romero destaca que Andalucía es de las Comunidades Autónomas que más preparadas estaban para esta ley. "Había mucho camino recorrido y concretamente la organización de las plataformas logísticas nos ha permitido desarrollar muchos aspectos y probablemente llegamos más preparados que otras administraciones", indicó. En este sentido Horacio Pijuán subraya que Andalucía cuenta con un modelo de compras logístico de referencia para un territorio de esta amplitud. "Un modelo que abarca desde la propia demanda hasta la facturación. Desde la compra, aprovisionamiento y distribución, hasta la facturación y pago en un único modelo".

Antonio León, director gerente del Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva, hace énfasis en el rol de la contratación pública como elemento estratégico de crecimiento. Según los datos aportados en el coloquio, en España la contratación pública supone el 20% del PIB, unos 200.000 millones de euros. "La ley se aparta de la cultura clásica del precio y empiezan a introducirse otros elementos que tienen que ver con la calidad. Esto puede dar cierta libertad a que los profesionales puedan tomar decisiones sobre tecnologías, medicamentos o servicios que respondan a unos parámetros de calidad que ellos establezcan", afirmó León. Desde su punto de vista esto ya es "un elemento transformador".

En su opinión, los ciudadanos se van a beneficiar ya que en este marco propicia una provisión amparada en una mayor calidad. Además del usuario, esta ley abre la competencia y hace un guiño claro hacia las pymes. "Las pymes siempre han tenido sus dificultades respecto a las grandes corporaciones y para ellas supone un beneficio importante", dijo León.

Para Antonio Castro, director gerente del Hospital Virgen Macarena de Sevilla, desde que en el SAS se idearon las plataformas logísticas de compras ya había una voluntad de ordenar la contratación pública. "Lo único que determina en el sector sanitario es la urgencia de la necesidad, que muchas veces choca con los procedimientos administrativos establecidos habitualmente".

Al analizar la filosofía que inspira la nueva norma, Antonio León cree que la ley "introduce formas de contratación en un nuevo escenario con la industria que con el contrato clásico de suministros antes no se contemplaban". Así, "podemos hablar de modelos de riesgo compartido o pago por resultados". Durante el debate los participantes distinguieron entre los contratos de baja cuantía que dan oportunidades a las Pymes y los de alta complejidad. "En estos casos complejos la nueva ley permite tratar con los proveedores antes y orientar las licitaciones a la demanda concreta de modo que se formaliza el proceso y puede ser más transparente" subraya. Para León, "pasamos del proveedor clásico al colaborador estratégico".

Nieves Romero destaca que la nueva ley va a ayudar y "a dar seguridad". "Los contratos de baja cuantía serán procesos supersimplificados. En general nos da seguridad jurídica y aporta valores a la forma de trabajo y a las relaciones con los proveedores", explica. Así, alude a la importancia de los procesos y al establecimiento de Resultados en Salud para "blindar ese marco de relación al que la ley se adapta como un guante".

Por último, para Antonio Castro el futuro cercano "no supone una nueva forma de comprar, pero sí una nueva forma de ofrecer un servicio o un suministro". En su opinión, "no se trata de ir al mercado y elegir un producto". "Esta nueva ley facilita el poder plantear una necesidad y hacer un contrato que permita innovar y ofrecer una solución a una demanda concreta. De este modo, la compra innovadora se antoja como una asociación de las dos partes para encontrar un resultado ad hoc específico. "Podemos plantear necesidades y explorar el mercado. No es aceptar o no una innovación que alguien te ofrece si no es establecer una asociación para la innovación", subraya Castro.

Respecto a la implantación de la facturación electrónica, Horacio Pijuán anunció que, aunque aun está por implementarse adecuadamente a nivel nacional, "tenemos gran parte avanzada y estamos desarrollándola", con lo que según sus previsiones aproximadamente en 12 meses podrá alcanzarse un 100% de la licitación electrónica. "De entrada, empezamos por los procedimientos nuevos que establece la ley, como el Procedimiento de Contratación Simplificado y Supersimplificado", aseguró.

 



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