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10/12/2018 08:37:46
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Suprimir las subastas, algo más que reformar la ley y dar garantías

Los resultados electorales andaluces abren la posibilidad de formar un gobierno a los partidos que han prometido el fin de los concursos de fámacos.

En Andalucía, los resultados electorales han creado un escenario en el que podría cambiar profundamente la política farmacéutica de los últimos cinco años, representada básicamente por las subastas, los concursos para la selección pública de medicamentos para la dispensación en farmacias cuando la prescripción se haga por principio activo. Las farmacias, que han venido oponiéndose sin mucho éxito al mecanismo, y la industria están analizando la posibilidad de que los concursos acaben y cómo les va a influir.

Las subastas de medicamentos en Andalucía tienen su apoyo legal en el artículo 60 bis y siguientes de la Ley de Farmacia de Andalucía y para suprimir los concursos público habría que reformar la ley, aunque expertos sostienen que, como los artículos que establecen las subastas fueron introducidos en una reforma por decreto ley regional, se pueden anular de la misma manera.

Según expertos juristas consultados por CF la solución sobre cómo acabar con las subastas no es sencilla. “En teoría -admite Manuel Ayudarte, asesor jurídico de la Confederación Empresarial de Farmacias de Andalucia (Ceofa)- bastaría con suprimir los citados artículos 60 bis y siguientes”, pero añade que habría que aclarar qué pasa con los laboratorios que tienen acuerdos con la Administración.

Un laberinto jurídico

En primer lugar, los acuerdos con los laboratorios no son oficialmente contratos, “aunque en realidad si lo sean”, precisa Ayudarte. La Administración andaluza evitó la fórmula contractual para evitar las compensaciones económicas derivadas de cualquier contingencia y los controles que impone la Ley de Contratos del Sector Público, y los denomina convenios. Así, habría una fórmula, tras la reforma de la ley, que es mantener vigentes los acuerdos hasta su extinción y no convocar nuevos concursos. Esta es la opinión del abogado Nicolás Toro, que piensa que ésta sería una fórmula cómoda para superar la situación.

Pero Ayudarte recuerda que “si se reforma la ley y se suprimen los artículos referidos, desaparecerá la obligatoriedad de que una farmacia dispense los medicamentos de la subasta y eso dejaría los acuerdos en el aire.

De momento, los laboratorios consultados dan por hecho que los acuerdos siguen vigentes hasta su fecha de finalización, aunque reconocen que hay un clima de incertidumbre.

Sin hacer valoraciones

Los laboratorios que han venido participando en las subastas y han sido adjudicatarios, prefieren no hacer ningún tipo de valoración hasta que se forme Gobierno y se vea cuál va a ser su línea de actuación, pero adelantan que, para muchos de ellos, el fin de la selección pública de medicamentos supondría problemas económicos porque han sido las subastas las que han permitido consolidar su presencia en España con un mercado garantizado durante los dos años de vigencia de cada adjudicación.

Así lo explica a CF Enrique Ruiz, presidente de VIR, que señala que “es muy pronto para saber si van a continuar o no las subastas, pero algunos tenemos acuerdos vigentes, lo que proporciona cierta tranquilidad; pero, evidentemente, suspender las subastas tendría impactos significativos”.
Lo mismo admite Aurovitas, que no ha querido entrar en más detalles, o Laboratorios Durbán que señalan que harán una valoración cuando haya medidas concretas.

En la otra parte de la industria, los grandes laboratorios que no han querido participar en las subastas y las han recurrido ante los tribunales, la situación es de expectación, porque, dicen, una cosa es prometer el fin de los concursos y otra es el mecanismo legislativo para la anulación y las consecuencias jurídicas de la suspensión.

Reparto de escaños

Los 109 escaños del Parlamento de Andalucía han quedado repartidos de la siguiente manera: el PSOE ha obtenido 33; el PP, 26; C’s, 21; Adelante Andalucía, 17, y Vox, 12. Teniendo en cuenta que la mayoría absoluta está en los 55 escaños, se ven las alianzas posibles.

Desde el punto de vista de la política farmacéutica, existe bastante coincidencia entre PP y Ciudadanos y, para defender una política continuista, entre PSOE y Adelante Andalucía (la marca de Podemos en Andalucía).

De ahí que la irrupción de Vox, que no ha explicado cuál sería su posición sobre las subastas de medicamentos y pide la devolución de las competencias en sanidad a la Administración central, determine la imposibilidad de que gobierne Susana Díaz si no es con el apoyo explícito de uno de los partidos contrarios a su política sanitaria.

AF a centros sociosanitarios

Además, aparte de la selección pública de medicamentos para Atención Primaria, el nuevo Gobierno tendrá que regular la atención farmacéutica a los centros sociosanitarios ya que los tribunales anularon el decreto del actual Ejecutivo.

Sin embargo, los primeros pasos de las conversaciones entre PP y C’s no están siendo fáciles porque ambos reclaman la presidencia, aunque al cierre de esta edición habría ya una aceptación de que el nuevo presidente sea el dirigente del PP, Juan Manuel Moreno, y C’s obtendría la presidencia del Parlamento y varias consejerías.

Además, aunque necesitan el apoyo de Vox, C’s quiere desmarcarse de lo que consideran “ultraderecha”, sobre todo teniendo en cuenta que se aproximan elecciones al Parlamento europeo, municipales y autonómicas y la posibilidad de que se convoquen elecciones generales.

Aunque se han explorado otras fórmulas que integraban al PSOE “para cerrar el paso a la extrema derecha”, todo parece indicar que habrá un acuerdo básico entre PP y C’s, aunque puede tardar en concretarse. De ese Gobierno dependerá la política farmacéutica de Andalucía los próximos cuatro años.



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