Noticia de Contratación

Esta es la conclusión del grupo de trabajo Auditoría Ciudadana de la Deuda en Sanidad, tras analizar los contratos públicos de la Consejería de Sanidad que ascendieron el año pasado a un total de 1.402,3 millones de euros, según han anunciado hoy en rueda de prensa.

De este importe, 698,94 millones de euros, un 49,8% del valor total contratado por Sanidad, fue concedido por la modalidad de "contratos menores", que permite "trocear" los contratos de suministros o servicios para que no superen los 18.000 euros y evitar tener que convocar un concurso público.

Solo la mitad de la contratación, por valor de 703,3 millones de euros, un 50,2% del importe total contratado en 2016, fue adjudicado mediante concurso público, según el informe basado en el análisis de las licitaciones publicadas en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) y en el Portal de Contratación Pública de la Comunidad de Madrid.

Del total de contratos mayores, 552,5 millones de euros se adjudicaron a empresas de suministros. De ello, "un 35% del valor total se concentró en solo diez empresas", según el estudio, pero solo 3,7% fue para empresas fabricantes de genéricos.

"Una parte sustancial de fondos públicos se dedica a financiar al sector privado, mientras no deja de aumentar la deuda pública que pagamos todos los ciudadanos", según Audita Sanidad.

Esta distribución, donde "la mitad del importe se adjudica sin concurso, es especialmente elevada en la región madrileña, muy por encima de otras CCAA como Cataluña", asegura el grupo de trabajo.

Pero además, si se tiene en cuenta el número de contratos con empresas de suministros y servicios, "solamente 1.443 contratos fueron adjudicados por concurso", al superar los importes fijados en la legislación, de 18.000 euros en suministros y 50.000 en el caso de contratos de obras.

La contratación restante, es decir 485.119 contratos menores se concedieron sin licitación. Ello arroja una proporción del 99,7% de contratos sin licitación y solo un 0,3% de ellos concedido mediante concurso público.

Ello supone, según el grupo, que cada día se firman en media 1.330 contratos menores, sin concurso público en Madrid, mientras en otras CCAA el porcentaje de contratos menores concedidos "no llega al 5% del total".

Según Audita Sanidad, la corrupción en el sector sanitario se produce principalmente a través de 'lobbys' que ejercen influencia para la compra de tecnologías y medicamentos, pero también por "abuso de poder" de los responsables; "fraude y malversación" en la utilización de tecnologías y medicamentos, "marketing indebido" con regalos o favores a cambio de incluir productos en recetas médicas, u otras como las "puertas giratorias" de cargos públicos.

Audita Sanidad contabilizó el año pasado irregularidades en los modelos de colaboración público-privada (4 casos); acoso y denuncias judiciales contra los denunciantes de corrupción (4 casos), políticas laborales irregulares o ilegales (3 casos) e ingeniería financiera y evasión fiscal (2 casos).

Mientras, la deuda pública madrileña ha pasado de 4.218 millones de euros en el año 2000 a los 30.450 millones en 2016; la calidad del sistema sanitario público se ha deteriorado por falta de inversión; se han recortado las plantillas y precarizado las condiciones laborales, a consecuencia de "la práctica clientelar".

"Es hora de cuestionar abiertamente la legitimidad de la deuda de la Comunidad de Madrid, que no para de crecer a pesar de todos los recortes sociales y austeridad impuestos", ya que el origen de la deuda está en "la falta de transparencia de los contratos y las desviaciones económicas que no han sido investigadas", han concluido.

Un estudio de la Comisión Europea sobre corrupción en la sanidad cifró entre 10% y 25% los sobrecostes que en 2013 produjeron las prácticas corruptas en la contratación sanitaria en quince países de la UE, porcentaje que emplea Audita Sanidad para calcular el sobrecoste en Madrid, han concluido.