AstraZeneca está implementando una ambiciosa estrategia de sostenibilidad en la industria farmacéutica global, reconociendo el cambio climático como una amenaza directa para la salud humana y el planeta. Su plan global, "Ambition Zero Carbon", busca lograr un modelo de atención sanitaria con cero emisiones netas, integrando la responsabilidad medioambiental desde el diseño y la fabricación de medicamentos hasta la formación de profesionales sanitarios. La compañía enfatiza que "No concebimos la innovación científica sin responsabilidad medioambiental", marcando la sostenibilidad como un pilar fundamental que va más allá de la innovación terapéutica tradicional. Esta estrategia estructural se alinea con los valores de la empresa y la evolución del sistema sanitario.

Para materializar este compromiso, AstraZeneca está implementando la transición hacia energías renovables y soluciones energéticas eficientes, lo cual impacta tanto sus operaciones directas (Alcance 2) como las de sus proveedores (Alcance 1 y 3). En España, sus oficinas de Madrid y Barcelona utilizan electricidad 100% renovable, y su nuevo Global Hub en Barcelona generará más del 25% de su energía con paneles fotovoltaicos, diseñando todas sus nuevas instalaciones con criterios de sostenibilidad desde el inicio para maximizar la eficiencia energética. Además de la reducción directa de emisiones, la farmacéutica impulsa proyectos de restauración de ecosistemas y soluciones basadas en la naturaleza para capturar carbono, colaborando con su cadena de valor para asegurar un enfoque holístico que demuestre cómo la industria puede liderar la transición ecológica por el bienestar global.