Virginia está buscando convertirse en un centro de fabricación de medicamentos, siguiendo el ejemplo de su vecino, Carolina del Norte, que se ha consolidado como el epicentro de la producción farmacéutica en Estados Unidos gracias a atractivos paquetes de incentivos. Los legisladores de Virginia han aprobado propuestas de paquetes de desarrollo económico para AstraZeneca y Eli Lilly, con el objetivo de que estas compañías establezcan nuevas instalaciones de fabricación en el estado. Estos paquetes, valorados en más de 10 millones de dólares cada uno, están destinados a que AZ construya una planta masiva en el condado de Albemarle, cerca de la Universidad de Virginia en Charlottesville, y para que Lilly establezca una instalación de producción en el condado de Goochland, al noreste de Richmond.

La noticia sigue al anuncio de AstraZeneca el mes pasado de que había seleccionado Virginia para una enorme planta de fabricación de sustancias farmacéuticas, que sería la instalación de mayor precio de la compañía hasta la fecha, con una inversión acordada de 4 mil millones de dólares. Esta inversión en Virginia forma parte del plan de la compañía británico-sueca de invertir 50 mil millones de dólares en Estados Unidos hasta 2030. Aunque ninguna de las compañías ha confirmado el informe sobre los paquetes específicos, estas acciones reflejan el esfuerzo de Virginia por atraer a las principales empresas farmacéuticas y consolidarse en el sector.