La FDA ha concedido aprobaciones restringidas a las vacunas de ARNm actualizadas contra la COVID-19 de Pfizer y Moderna, así como a la vacuna basada en proteínas de Novavax, para la próxima temporada de virus respiratorios. Las nuevas versiones de Comirnaty de Pfizer/BioNTech y Spikevax/mNEXSPIKE de Moderna están diseñadas para combatir la sublínea LP.8.1 del virus SARS-CoV-2. Sin embargo, a diferencia de aprobaciones anteriores, estas nuevas autorizaciones limitan su uso a muchas personas en grupos de edad más jóvenes a aquellos con condiciones de salud subyacentes que los ponen en alto riesgo de resultados graves por COVID. Para personas de 5 a 64 años (Pfizer), de 6 meses a 64 años (Moderna Spikevax) o de 12 a 64 años (Moderna mNEXSPIKE y Novavax), se requiere al menos una condición subyacente para ser elegible. La aprobación es general para todas las personas de 65 años o más.

Estas aprobaciones se producen en un contexto de incertidumbre sobre la estrategia de la administración Trump respecto a las vacunas COVID-19, tras informes que sugerían una posible "prohibición" o un enfoque más estricto. Robert F. Kennedy Jr., de la administración, ha declarado que el marco regulatorio actual enfatiza la "ciencia, seguridad y sentido común" para garantizar el acceso a las vacunas para las personas vulnerables. Pfizer y BioNTech anunciaron la distribución "inmediata" de su vacuna actualizada para asegurar un suministro robusto. Por su parte, Novavax, en colaboración con Sanofi, planea ofrecer su vacuna basada en proteínas este otoño.